Desde Neo Sounds (Alfaomega) llevan años entregándonos destacadas biografías de grandes del rock’n’roll en general. Pero todavía son más grandes si lo que te va es el rock americano de raíces pues a nombres básicos como Tom Petty o Robbie Robertson se suman ahora John Fogerty y el patriarca Willie Nelson. Como siempre con 32 cuidadas páginas de fotografías en papel satinado con mayoría de fotos en color pero con muchas de los archivos personales de los artistas en blanco y negro y de marcado contenido íntimo.

La verdad es que era muy extraño que una biografía tan espléndida como la de John Fogerty, y de un músico tan esencial y querido como él, hubiera tardado tanto en ser traducida al castellano, muy bien por cierto. Pero bueno, nos consolaremos. Ya tenemos aquí “Fortunate Son. Mi Vida, Mi Música” (Neo-Sounds / Alfaomega). 450 amenas paginas como la música que creó para los históricos y esenciales Creedence Clearwater Revival. Fogerty es uno de los pocos músicos que está dentro de los 100 mejores cantantes y dentro de los 100 mejores guitarristas de la historia. En ambos casos muy merecido pues destaca sobremanera en ambas facetas, aunque más aún por su energía al cantar. Si hubiera lista con los mejores compositores tendría que estar entre los 10 primeros pues la estela de éxitos y grandes canciones que dejó en la segunda mitad de los 60 es difícilmente igualable. Título apropiado y lógico con la que quizás sea su canción más emblemática. También apropiado título para una gran y sentida introducción con el nombre de “Hermoso Soñador” en la que se remonta a los 4 años de edad cuando conoció y se prendó del compositor Stephen Foster. Un Prólogo en el que ya nos habla de la traición de su manager y de su grupo, así como del robo de sus canciones. Soñó inspirándose en los más grandes (Elvis Presley, Carl Perkins, Little Richard, Ray Charles, Benny Goodman, Chuck Berry, ScottyMoore, Bill Haley, Duane Eddy, B.B. King, Gene Vincent, Dale Hawkins, Freddie King, Bo Diddley, Charlie Christian, Roy Orbison), como nos relata en el capítulo “Mis Referentes” y nos hizo soñar con sus siempre eufóricas y contagiosas canciones. Sigue llevando ese entusiasmo en vivo como demostró en el último Azkena Rock. No es raro que fuera elegido de los mejores libros de su cosecha por The Daily Beast o The Washington Post. Tampoco es extraño que siga habiendo hoy en día en cualquier momento en los USA, una banda tocando en un bar algún clásico de la Creedence.

Sentida dedicatoria a su mujer que, según él, le salvó la vida. “A Julie. Te amo más que al cielo”. También sincero (algo que sobra a lo largo de todo el libro) al decirnos: “Yo no me metí en la música para ligar. Me metí en la música, por la música”. También bautiza con acierto varios de los capítulos más destacados del libro. Es el caso de “Guerras Sucias”, “La Marcha De Tom”, “Zanz, No Sabe Bailar (Pero Te Robará El Dinero)” o el genial y que sigue mostrando que no ha perdido su orgullo, “Por Qué No Actué en el Salón de La Fama del Rock And Roll o A Ellos No les importa La Música, Solo El Dinero”. Ken Hoffman define muy bien el libro y el artista. “Fortunate Son es un viaje fascinante narrado por la voz atormentada del propio artista”. También Bill Bentley: “En esencia, este libro es una historia de redención impulsada por el poder del amor, el de su esposa, Juli”. Según el Chicago Tribune, “Un relato clásico de un superviviente del rock and roll. Destacado Epílogo titulado “Volando” con tonos místicos sobre su último tema compuesto, pero regresando a la injusticia que sufrió durante décadas y que motivó que no tocara sus propias canciones. Final: “Mañana me levantaré pronto y tocaré la guitarra. Sin duda soñaré… Porque mi sueño se hizo realidad” ¡A nosotros nos sigue haciéndonos soñar con sus inolvidables canciones!

Si te pasas por www.alfaomega.es podrás conseguirlo y también el más que recomendable volumen de Willie Nelson (Con David Ritz): "Es Una Larga Historia. Mi Vida". Sí que es la autobiografía definitiva de Willie Nelson y es un libro sobrio, divertido y claro. Algo a lo que contribuye también la gran aportación del genial biógrafo David Ritz. Definitivamente lo dice mejor él. “Lo que yo digo es que esta es la historia de mi vida, contada de un modo tan claro como el cielo de Texas y al mismo ritmo en que la he vivido. Es una historia de inquietudes, de momentos puros, de una existencia consecuente. De mi infancia en Abbott (Texas), desde donde partí hacia la región del noroeste del Pacífico, hacia Nashville, hacia Hawái, para luego regresar. De mi experiencia como vendedor de aspiradoras y enciclopedias mientras presentaba programas de radio y componía una canción tras otra con la esperanza de alcanzar el éxito. Es una historia de amores verdaderos, épocas de desenfreno, grandes amistades y bares, acompañada de su correspondiente banda sonora. Mi vida es carretera, casa y de nuevo carretera, y la he puesto por escrito para ti con el corazón en la mano” Si no te convencen estas palabras tan sinceras y emotivas de uno de los más grandes del country de toda la historia y el último de los supervivientes… Además sigue grabando destacados discos año tras año a pesar de estar a punto de cumplir los 90.

Autor: Txema Mañeru